Me encanta salir con mi amigo
Me encanta salir con mi amigo

Pedro (San Juan de Miraflores, 26). Doctora, desde niño siempre he sentido una ligera atracción por los hombres. A pesar de ello, solo he tenido relaciones con mujeres, al menos hasta hace algunos meses. Todo estaba bien, aunque debo admitir que jamás llegué a enamorarme de una dama ya que siento que son muy frías, y por más que el sexo era bueno, no me quedaba con ellas y duraba con ellas solo hasta dos meses. Esa vida ha hecho que muchos piensen que soy un mujeriego, pero lo cierto es que siempre he buscado estar enamorado. Hasta ahora no se ha dado la oportunidad.

A pesar de todo lo que he pasado en el amor, le confieso que jamás creí que me iba a gustar mi mejor amigo, Wilmer, con quien llevo más de cinco años de amistad.

La historia comenzó cuando estábamos en una noche de juerga. Ahí me di cuenta que era una linda persona y que su físico me atraía mucho.

Toda esa noche no pude dormir por pensar en él. Confieso que durante algunos meses elaboré un plan para que se fijara en mí y me dijera algo que haga sentir bien.

Al final mi objetivo resultó y un día quedamos en ir al cine. Ya en la sala yo me sentía muy a gusto, pero no sabía cómo expresarle mis sentimientos. No entendí nada de la película y él sí estaba muy bien concentrado. Al final le revelé mis intenciones y le dije que me agradaba mucho su amistad y que lo había pasado muy bien y que salidas como esta deben repetirse a menudo.

Sin embargo, a la mañana siguiente, a Wilmer le dio un ataque de pánico por todo lo que le había dicho. Sé que él siempre ha llevado una vida heterosexual y que su entorno se podría consternar sobre nuestra amistad. Qué debo hacer para no equivocarme.

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