Me entregué a una pasión prohibida
Me entregué a una pasión prohibida

Por: Magaly Moro

magalymoro@grupoepensa.pe

Camilo (46, San Luis). Doctora, toda mi vida he trabajado para sacar adelante a mi familia. Me casé muy joven luego de que mi mujer quedó embarazada.

Gracias a Dios tuvimos el apoyo de nuestros seres queridos. Con el tiempo tuvimos más hijos, dos niñas y un pequeño de 2 años.

Doctora, desde hace un año decidí trabajar como taxista. Antes era militar, pero me retiré por la condición de vida que ofrecía ese trabajo. Actualmente sigo cobrando mi mensualidad, aunque hasta hace poco no alcanzaba para cubrir todos los gastos de la casa. Comencé a trabajar más horas, pues la calle estaba dura ya que muchas personas prefieren pedir un taxi mediante los aplicativos móviles.

Ante esta situación decidí convertirme en chofer de algunos clientes exclusivos. Las ganancias subieron y mi familia ahora vive en paz, pero mis sentimientos han cambiado. Desde hace algunos meses estoy manteniendo una relación estrictamente sexual con una cliente. Esta mujer ha confesado que tiene sentimientos fuertes por mí. Al principio me negué a corresponderle ya que pensé que solo era una distracción.

No obstante, he descubierto que la amo. Doctora, esta es una decisión difícil de tomar, sé que ya engañé a mi esposa, pero no quiero hacerlo más. Mis hijos se sentirían decepcionados si descubren mi secreto. Además, mi mujer es muy rencorosa y tengo pavor por las acciones que pueda tomar. ¿Debo quedarme callado y seguir con este idilio?

OJO CONSEJO

Debes enfrentar la realidad. Si fuiste valiente para salir con otra, ahora ten las mismas agallas y acepta las consecuencias de tus actos.

Debes enfrentar la realidad. Si fuiste valiente para salir con otra, ahora ten las mismas agallas y acepta las consecuencias de tus actos.