Se aprovechó de mi negocio

Daniela (Santa Anita, 42). Doctora, estoy muy triste luego de descubrir que mi esposo me engañó. Todo empezó cuando José se mudó cerca a mi puesto de verduras. Un día, mientras celebraba el aniversario del mercado donde trabajo, lo vi por primera vez. Me pareció un hombre muy interesante, pues me contó que había estudiado administración, pero que por cosas del destino tuvo que terminar en un lugar que no iba muy acorde a su estatus social.

De cualquier manera, la atracción que tuve por él fue instantánea, gracias a su inteligencia y buen porte.

Doctora, me siento una mujer atractiva. Es más, yo hago ejercicio constantemente y eso me ha llevado a tener un buen cuerpo pese a que hace poco di a luz.

Desde que vi a José, sabía que algo iba a suceder entre los dos. Con el tiempo me dio señales de que le interesaba. Comenzamos a salir. Sin embargo, luego de dos años me di cuenta de que no tenía buenos planes conmigo.

Él llegaba a mi casa, incluso me ayudaba a ver mi negocio y me había convencido de hacer unos cambios en mi pequeña empresa. Pero una noche, luego de que José dejó abierta su cuenta de Facebook, descubrí que tenía una novia, al parecer de mucha plata. Hablaba de mí como si yo fuese una escoria. 

Inmediatamente decidí dejarlo y botarlo de mi vida, pero lastimosamente se convirtió en el apoderado de mi negocio y decidió denunciarme por algo que era falso. Ahora me encuentro en un gran problema del que sé que podré salir. Doctora, no le miento, me siento mal conmigo misma por haber sido tan tonta y creer en las promesas de este sujeto.