Una mujer llamada Birgitte Kallestad de 24 años murió tras rescatar un perro abandonado en su viaje a Filipinas.
La enfermera de profesión fue una amante de los animales y nunca imaginó que tratar de ayudar a un cachorrito le costara la vida, según Daily Mail.
Luego del incidente, la familia de la mujer hizo público el fallecimiento de su hija para alertar a otras personas sobre los peligros de adoptar a perros abandonados por más amor que tengan a los animales.
Según los padres de Birgitte Kallestad, todos de nacionalidad noruega, el cachorro tenía rabia y mientras jugaban le causó heridas. Con sus conocimientos se automedicó, pero no fue suficiente.
Sin embargo, los médicos no pudieron detectar qué tenía aunque fue hospitalizada varias veces, pero cuando pudieron confirmar que el perrito la había contagiado de rabia, ya era demasiado tarde ya que ella había fallecido.
Las autoridades explican que se demoraron con el diagnóstico ya que desde hace 200 años no se registra dicha enfermedad en la región.
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