Hellen Ñañez, de 28 años, quien perdió a 13 familiares a causa de la COVID-19 en la ciudad de Pisco, este fin de semana confirmó que su padre Guillermo Ñañez también falleció por esta enfermedad. Él se encontraba internado en el hospital San Juan de Dios del Ministerio de Salud.
“Me dolió muchísimo. Me dolió mucho en el alma perder a mi papá”, expresó Hellen Ñañez entre lágrimas a Buenos días Perú. La joven contó que su progenitor había permanecido más de 30 días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de dicho hospital.
Una tragedia familiar
La tragedia de la joven comenzó el 13 de junio del 2020 con la muerte de su tía. Luego fallecieron sus tíos, primos y su abuelo. Incluso, ella misma estuvo contagiada con el virus, pero de manera leve.
Según contó a RPP, ella ahora tiene una deuda superior a los 100 mil soles debido a la compra de medicinas, recarga de balones de oxígeno, traslados de emergencia y gastos fúnebres.
“Tuve que comprar guantes y jeringas”
Según el testimonio de la joven al noticiero matinal, su padre requería también de un equipo de diálisis. “Mi papá necesitaba una diálisis, una sola diálisis de arranque para tener más oportunidades de vivir y no lo tuvo”, manifestó.
Hellen Ñañez denunció además que el personal de salud le pedía guantes quirúrgicos y hasta jeringas para asistir a su padre.
“Tengo todas mis boletas. Me pedían hasta guantes quirúrgicos porque en el hospital ni siquiera hay guantes. Hasta las agujas las tenía que comprar en el hospital”, refirió.