Mi enamorado es un vago

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Actualizado el 09/03/2017, 08:34 a.m.

Por: Magaly Moro

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Emily (28 años, Puente Piedra). Doctora, le escribo para contarle que estoy saliendo con alguien de mi barrio. Josué es la persona más bromista que haya conocido. Sin embargo, por esa misma característica de su personalidad, mi familia no lo acepta.

Mi mamá cree que él dice todo a la broma, ya que algunas veces lo hace. Lo conozco desde mi infancia y recién ahora ha surgido el amor entre ambos.

La verdad, es que al inicio me dio vergüenza que nos relacionen y ni siquiera les conté a mis amigas. Mis padres se dieron cuenta por las llamadas en las noches y mi sonrisa de oreja a oreja. Entonces, tuve que contarles que tenía una relación desde hace seis meses con nuestro vecino.

Al inicio pensaron que era broma, pues yo antes hablaba barbaridades de su falta de un empleo conocido.

Eso es verdad y resulta que hasta ahora no consigue ni un trabajo.

Josué siempre quiso ser chef de un prestigioso restaurante y estudió para ello. El problema es que se niega a aceptar cualquier otro trabajo. Siempre repite esta frase: “Prefiero estar en casa, que estar lavando platos, yo estudié para algo” . Y con esa excusa o “meta” no trabaja desde hace un año.

Yo ya sabía de esta situación cuando comenzamos nuestra relación, pero pensé que era algo momentáneo. Incluso, llegué a pensar que era broma, pero me equivoqué y sigue desempleado.

Yo amo demasiado a Josué y deseo que él progrese, pero no sé cómo hacerlo, porque no cambia por más que espero que algo lo motive a trabajar. Doctora, dígame qué hacer.

OJO CONSEJO:

Querida, si sabías de esta situación, tuviste que hablar sinceramente para ver si tenían los mismos objetivos. Es momento de que lo hagas ahora y lo más pronto posible.

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