Magaly Moro

Magaly Moro

Tomás (27 años, Surquillo). Estimada doctora Magaly, me complace saludarla. Soy un fiel seguidor de sus consejos. Veo que tiene el don de la empatía y por eso recurro a usted para que me ayude a resolver mi inquietud amorosa.

Estoy enamorado de Rosalía. La conocí hace medio año, mi hermana me la presentó, es su amiga.

Yo pertenezco a la Iglesia Adventista del Séptimo Día al igual que mi familia. Cada vez que tenemos alguna reunión, mi hermana siempre invita a Rosalía, ella es católica, pero eso no le impide participar del encuentro.

Al poco tiempo de tratarla me di cuenta de que era alegre, divertida, honesta, madura y tenía buenos sentimientos, siempre colabora en actividades para ayudar al prójimo.

A los tres meses de tratarla le declaré mi amor. Rosalía se mostró sorprendida, pero me dijo que yo no le era indiferente. Sin embargo, me pidió tomar las cosas con calma y me sugirió conocernos más.

A mí me agradó la idea y reuní a mis padres para contarles de mis sentimientos por ella. Doctora, ellos inmediatamente se mostraron en desacuerdo con una futura relación. Me dijeron que no puedo tener una pareja que no sea de mi misma religión y que debería olvidarme definitivamente de esa muchacha. Además, me exigieron que deje de ser su amigo.

No quiero hacer eso. Estoy muy enamorado de ella. Aún no le he dicho que mi religión es un obstáculo entre nosotros. He pensado en dejar de ser adventista para que podamos ser pareja. ¿Qué hago, señora Moro?

Ojo al consejo

Estimado Tomás, te sugiero que le expliques a Rosalía el problema. Considero que la religión no debe separar a las personas que se quieren. Si ella siente lo mismo por ti, sería bueno que se den una oportunidad. Conversa con tus padres nuevamente. Si deseas dejar tu religión, tienes que estar totalmente seguro de que esto no te afectará. Mucha suerte.