Magaly Moro

Magaly Moro

Nicolás (27 años, San Juan de Miraflores). Doctora Moro, me es grato saludarla. Le escribo porque tengo una inquietud con respecto a mi relación y creo que usted me puede ayudar a resolver.

Estoy con Luana desde hace dos años. Es la mujer más tierna que he conocido. Siempre me engríe, es muy cariñosa y amable. Yo trato de corresponder cada una de sus atenciones. La quiero con todo mi ser.

Sin embargo, desde hace tres semanas empezamos a discutir por un tema que considero banal, resulta que a mí me fascinan los tatuajes. Cuando la conocí yo tenía dos en mis brazos. Uno de ellos dice: "Dios es mi fuerza" y el otro es la imagen de un fénix con la palabra "renacer".

Cuando Luana vio mis tatuajes no mostró desagrado. Por el contrario, expresó: "están bonitos".

No obstante, hace tres semanas decidí hacerme dos tatuajes más. Uno en la espalda con el dibujo de un águila con las alas abiertas y el otro en el pecho con la imagen de una cruz.

No le comenté nada a Luana, quería darle una sorpresa, pero todo resultó mal. Apenas se los mostré, ella me gritó que estaban horribles, que detestaba los tatuajes, que me había mentido desde un inicio porque no le gustaban esas "marcas" en el cuerpo y me exigió que borre cada uno de ellos porque si no lo hacía nuestra relación se terminaba.

Doctora, me quedé en shock. No quiero borrar mis tatuajes, a mi me gustan. Pero tampoco quiero que Luana me deje. ¿Qué puedo hacer?

Ojo al consejo

Estimado Nicolás, Luana no puede exigirte que borres los tatuajes que tanto te fascinan. Eso no es justo. Tu pareja debe respetar tu forma de pensar y tus gustos. No puede existir una imposición de ninguna de las partes. Además, no puede condicionarte. Dialoga con ella y hazle ver que está equivocada. Si no cede, evalúa el fin del romance. Mucha suerte.