Siente celos de un actor

Por: Magaly Moro

magalymoro@grupoepensa.pe

Galia (31 años, Los Olivos). Doctora, le escribo porque mi enamorado no entiende mi afición por el mundo del espectáculo. Ese gusto proviene de mi infancia, pues recuerdo haber acompañado a mi abuela a ver su novela cada tarde.

Mi madre deseaba que converse y juegue con mi nona Toñita, como le decíamos de cariño, hasta que ella regresara de trabajar. Sin embargo, la abuela era una persona muy parca y solo sonreía cuando hacíamos la sobremesa, imaginando lo que iba a suceder en el episodio de la novela. La estricta rutina que teníamos comenzaba con mi llegada a las 2 de la tarde.

Me esperaba con la comida caliente, luego yo tenía que avanzar las tareas de la escuela, porque a las 5 p.m. se prendía el televisor. Cuando estaba enojada conmigo, Toñita no me dejaba acompañarla, pero eso sucedía rara vez. Es así que pasé mi primaria y secundaria con el cuchicheo por tal o cual galán. Esas tardes de complicidad con mi abuelita se convirtieron en un hábito que mi enamorado odia desde que descubrió, por cuarta vez, que estoy enganchada con una novela de Fernando Colunga. Sus celos son tontos porque este es un amor platónico, yo simplemente he sentido admiración hacia su carrera y belleza. El problema es que Javier cree que yo idealizo mucho al hombre de mis sueños y que, por ello, no deseo comprometerme. La verdad es que yo amo mucho a mi chico y deseo lo mejor para nuestra relación, que tiene tres años, aunque ahora siento que Javier es muy inseguro y que sus reclamos por las novelas parecen una broma de mal gusto. Doctora, ¿estoy equivocada?

OJO CONSEJO:

Querida, nadie tiene que juzgar tus gustos y creencias. Si aún amas a Javier, hazle notar que Fernando Colunga es parte de la ficción. Suerte.

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