Yo inspector y ella ambulante

Por: Magaly Moro

magalymoro@grupoepensa.pe

Leonardo (44, Centro de Lima). Voy a comenzar esta historia con una frase: “Yo soy un inspector municipal y ella es una vendedora ambulante en Gamarra”.

Le cuento que durante las fechas festivas hubo muchos operativos para decomisar productos de venta ilegal. En una de mis rondas, me tocó decomisar sus productos a varias personas. No me hace sentir bien esto, pero es mi trabajo. La cuestión es que una de las mujeres que se quejaba de nuestra labor, calificándola como un abuso y una injusticia, me pareció muy familiar. Me acerqué a ella y le comenté que luego podía ir al depósito y pagar su multa respectiva. Traté de recordar su nombre, pero no hallaba respuesta.

Esperé a que se acercara al lugar para solicitar sus cosas y preguntarle quién era. Cuando llegó con todos sus familiares a gritar, le pedí su DNI para identificarla y comenzar el proceso. Al ver su identificación, pude recordar que esta chica, Mirian, fue mi enamorada durante la secundaria. Estaba totalmente cambiada. Cuando éramos más jóvenes, ella era más rellenita y tenía frenillos. Después de la ruptura, tomamos rubros distintos. Esta casualidad de la vida me hizo reír y a ella la confundió. Le dije quién era y me reconoció. Comenzamos a hablar y le devolví sus cosas. Me contó que estaba divorciada y que su negocio era la única forma de sacar adelante a sus hijos. Por mi parte, no había mucho que contar, porque me mantuve siempre soltero.

Le he pedido una cita, pero sus hijos me tienen cólera por decomisar su mercadería. Doctora, ¿debería seguir insistiendo? Realmente me gusta mucho. 

OJO CONSEJO

No le veo el problema. Si hay sentimientos de por medio, lucha por ella. Trata de cambiar la imagen negativa que dejaste en sus hijos. Paciencia y todo irá bien. 

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