¿Sabes a dónde van tus celulares viejos?

Durante el 2014, más de 37 mil toneladas de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) fueron desechados en el Perú. Por los elementos que se utilizan en su fabricación, estos dispositivos deberían recibir un tratamiento especial, pero ello no siempre ocurre.

En el país solo existen cinco plantas de tratamiento de RAEE, todas ubicadas en Lima, que procesan cada año entre 2 mil y 3 mil toneladas. Esto representa entre el 8% y el 10% de lo que se produce a nivel nacional, según cálculos del Ministerio del Ambiente (Minam).

Esas cinco plantas almacenan los residuos peligrosos en tres rellenos de seguridad, cuya capacidad resulta insuficiente.

Problema. Una enorme cantidad de aparatos no procesados termina en basurales, centros informales de reciclaje o abandonados al aire libre. En los últimos 20 años, la poca capacidad de procesamiento ha generado que en estos lugares se acumulen 292 mil 330 toneladas de RAEE. De este total, más de 100 mil toneladas provienen de computadores, celulares y pequeños electrodomésticos.

En 2012, el Poder Ejecutivo aprobó el Reglamento Nacional de Gestión de RAEE, que establece -entre otros detalles- que los importadores de aparatos electrónicos están obligados recolectarlos cuando termine su periodo de vida útil.

Para verificar que se cumpla esa disposición, cada importador debió presentar un “plan de manejo”, pero solo 48 empresas cumplieron esta exigencia. Aunque la norma establece sanciones, a la fecha no se ha emitido ninguna multa.