Vargas Llosa sufre por piura

El día de su cumpleaños 81, acompañado de su pareja Isabel Preysler, el escritor Mario Vargas Llosa retornó a los primeros pasos de su largo camino recorrido con su literatura.

El novelista decidió celebrar un año más de existencia en Arequipa, su tierra natal. Antes de iniciar sus actividades, el narrador reflexionó sobre lo que viene ocurriendo en Piura, donde llevó parte de su formación escolar.

“Sé que, entre otros méritos, los piuranos saben resistir a la adversidad, que han experimentado a los largo de su historia muchos reveses, así como muchas satisfacciones. Y estoy seguro que una vez más sabrán sobreponerse a las dificultades y a las desgracias que están viviendo en estos momentos”, declaró en un video subido en la cuenta de Twitter de su nuera Susana Abad.

Como se recuerda, Vargas Llosa describió a Piura en su novela “La casa verde”: “Los forasteros se equivocan cuando dicen ‘las casas de la ciudad están a punto de caer’”.

Buenos recuerdos. El escritor también recordó que en 1945 llegó por primera vez a Piura para culminar sus estudios de primaria en el colegio Salesiano. Luego de cinco años de ausencia, el Nobel regresó para terminar la secundaria en la Gran Unidad Escolar San Miguel, en 1952. Un año inolvidable, según él mismo ha calificado, que lo vinculó para siempre a la ciudad.

“Varios de mis libros los escribí a partir de recuerdos y experiencias que viví en esa ciudad que llevo de una manera entrañable en el corazón y en la memoria. Quisiera hacerles llegar a los piuranos que están sufriendo una experiencia tan terrible, mi solidaridad, mi cariño y mi agradecimiento por los riquísimos recuerdos y por las enormes emociones que gracias a Piura me han acompañado desde entonces”, detalló el laureado escritor.

Arequipa. Ayer en la mañana, el novelista visitó su antigua casa, transformada ahora en la Biblioteca Regional que lleva su nombre y que espera albergar los 30 mil ejemplares prometidos por el intelectual.

“Entregaré todos los que tengo y los que iré adquiriendo en los años que me queden de vida, que espero sean muchos años más”, comentó el autor sobre su donación de 7 mil 675 ejemplares.

Vargas Llosa, junto a las autoridades del Gobierno Regional, miró los estantes y espacios que guardan los libros de su vida y detalles de su carrera de literato.

Además, cada rincón de la vieja casona guarda los primeros meses de existencia que fueron decisivos para el único premio Nobel que tiene el país.

La separación de sus padres fue lo que transformó, muchos años después en Piura, su vida tranquila bajo el cuidado materno, como narró en “El pez en el agua”. La presencia autoritaria de su padre, cuya muerte fue inventada para el pequeño Mario, se convirtió en la transgresión inicial de la vida del intelectual peruano. La primera realidad que decidió cambiar con la literatura: el germen de todas las ficciones que explotaría después con sus obras de narración precisa y estructuras complejas, como “La ciudad y los perros” y “Conversación en La Catedral”, que lo pusieron en la palestra de los maestros de la novela.

La separación de sus padres fue lo que transformó, muchos años después en Piura, su vida tranquila bajo el cuidado materno, como narró en “El pez en el agua”. La presencia autoritaria de su padre, cuya muerte fue inventada para el pequeño Mario, se convirtió en la transgresión inicial de la vida del intelectual peruano. La primera realidad que decidió cambiar con la literatura: el germen de todas las ficciones que explotaría después con sus obras de narración precisa y estructuras complejas, como “La ciudad y los perros” y “Conversación en La Catedral”, que lo pusieron en la palestra de los maestros de la novela.