Ponerse morado tiene varias causas y efectos. Por ejemplo, tener el ojo morado es porque alguien te aplicó un recto en esa zona y no ves o ves con dificultad.

También te pones morado cuando estás atragantándote con un pedazo de carne, y esto puede ocurrir en un almuerzo romántico, entre velas y globos rojos. Hasta de respiración boca a boca se puede necesitar en este caso.

Un chupetón con tirabuzón, que generalmente nace en una sesión amorosa, también se pone morado y puede poner morado de la vergüenza a quien lo exhibe en el cuello, por mencionar una parte del cuerpo.

Hay gente que se pone morada porque simplemente ha comido hasta por los codos. Esto en medicina se llama cianosis, coloración azulada de la piel que se debe a la falta de oxígeno en la sangre.

Y, para terminar, cuando un candidato -figurativamente- se pone morado por una acción políticamente incorrecta, ya huele a cadáver, ya fue, debe ceder su sitio a otro con mayores posibilidades.

Lo cierto es que un golpe que se pone morado, duele y a veces ese dolor llega al alma.

No recuerdo quién definió al color morado como provocativo, idiosincrático, perceptual, nostálgico, enigmático y enloquecedor. Parece que se mimetizó de morado hasta los huesos.

Esto fue todo por hoy, cierro el ojo crítico, hasta mañana.

VIDEOS RECOMENDADOS

MelissaLK sobre Samahara-Ojo
MelissaLK sobre Samahara-Ojo

TE PUEDE INTERESAR