El “segundo martillazo” aplicado este mediodía por el presidente para bajarle la llanta al retumbó en todo el país.

Y es que, en verdad, se imponía una medida de esta naturaleza, contundente, dura, porque muchos se estaban pasando de vivos frente al implacable Covid-19.

Esta especie de “Pico y placa” para la población de todas maneras achicará el número de personas en las calles y, por ende, será menor la posibilidad de contagiarse.

No olvidar que lunes, miércoles y viernes solo saldrán de sus viviendas los varones. Y los martes, jueves y sábado las mujeres. Los domingos habrá encierro general.

Solo así evitaremos concentraciones peligrosísimas como las que se generan a diario en mercados y plazas pese al control de la Policía y las Fuerzas Militares. ¿Vieron lo que pasó hoy en Villa El Salvador ante una convocatoria del Echa Muni para entregar víveres? La muerte. Eso no se hace ni por juego. Se formó un hormiguero.

55 peruanos fallecidos, 1414 casos positivos, 189 hospitalizados y 51 de ellos en cuidados intensivos debe llevarnos a poner las manos en remojo. Y, como siempre digo, un consejo de pata: #quédateEnCasa.

Esto fue todo por hoy, cierro el ojo crítico, hasta mañana.