Con Ojo Crítico
Con Ojo Crítico

¡Qué tal! Te divorcias, casi sin quererlo porque la sigues amando; es más, la amarás toda tu vida, sin embargo, ni bien das la vuelta, aun lloroso por el abrupto rompimiento, ella agarra tus fotografías, entre estas la que dominaba toda la sala, y las tira al tacho del olvido, como para que no quede huella de la relación y el recuerdo sea cada vez menos intenso.

Una situación parecida se dio esta mañana cuando el FC Barcelona, el Barça español, removió las gigantografías -incluida la que estaba en la entrada- y otras fotos de su casa durante 21 años, luego de confirmarse su llegada al Paris Saint-Germain (el PSG).

“Y claro, (los hinchas presentes) al verlo desaparecer de las paredes del estadio, sintieron otro cachetazo al corazón”, escribe Olé de Argentina. El primer bofetón fue que dejaba la azulgrana a pesar de que hizo todo para quedarse, como dijo entre lágrimas en la conferencia del adiós.

Y es que cuando el “matrimonio” se acaba, todo cambia de rumbo; a uno le duele más que al otro, uno sale mejor parado que el otro. Así ha sido siempre. Tomen nota. Con la partida del capitán argentino, el club dejaría de percibir 77 millones de euros en ingresos comerciales, 43 millones por disminución de merchandising y 17 millones por ingresos de taquilla.

La fidelidad en los tiempos de Messi
Videocolumna 'Con Ojo crítico' a cargo de Jaime Asián, director de Diario Ojo

El total de 137 millones será una reducción a los 1,266 millones que vale la marca en 2021. Y, en este caso, el “duelo” duró pocas horas y “La Pulga” ya da brincos de alegría, junto a Antonella Roccuzzo e hijos, al pie del Parque de los Príncipes. Cuarenta millones de euros por temporada es un buen aliciente. Y vivirá a cuerpo de rey.

En nuestro país estamos rogando para que el Messi del Banco Central de Reserva (BCR), Julio Velarde, se mantenga al frente del directorio porque el juego contra la subida del dólar está bravaza y él tiene que mover las dos cejas para volver a la tranquilidad cambiaria. No vaya a ser que a última hora se caiga el arreglo, como ocurrió con “La Pulga”. Esto fue todo por hoy, cierro el ojo crítico, hasta mañana.

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