Complicada la actual situación política de , quien perdió soga y cabra al tomar una ruta distinta a la del presidente

Como también era congresista, fue disuelta el 30 de setiembre, ante el aplauso de la mayoría del país.

Luego vino su “pecado” de jurar como presidenta encargada del Perú ante un Parlamento ya inexistente, salvo la Comisión Permanente.

Al día siguiente, tras consultar su decisión con la almohada, renunció al cargo de marras y también a la vicepresidencia de la República.

O sea, Mechita se quedó con las manos vacías. Talán, talán. Este martes, en entrevista con diario Correo, dice que sigue siendo vicepresidenta porque no hay nadie que acepte su dimisión. Pobechita.

Mientras tanto, el mandatario la ignora olímpicamente, le cerró las puertas de Palacio y prefiere no salir del país para no darle cabida.

Quien sí debe estar insoportable es Al ser notificado por el Tribunal Constitucional de la admisión a trámite de la demanda de competencia por el cierre el Parlamento, es tratado como presidente del Congreso.

¿No que solo era presidente de la Comisión Permanente? Esto seguramente despertará la lengua afilada de algunos fujimoristas.

De manera que Mercedes Aráoz y Pedro Olaechea están en modo ser o no ser, como diría Shakespeare.

Y esto fue todo por hoy, cierro el ojo crítico, hasta mañana.