Qué tal.

Una vez Manuel d´Ornellas, el irrepetible director que tuvo el diario Expreso, preguntó a un redactor: “¿Qué prefieres, el estrés del trabajo o el estrés de la desocupación? El redactor entendió la lección y corrió a buscar su mejor nota sin chistar más.

Tan lindo que es chambear a conciencia y bajo presión. Escrito está que dignifica al hombre, porque implica realización personal, utilidad, mejoramiento de la autoestima, desarrollo de una vocación o profesión e integración a la sociedad.

En Perú, hay que decirlo, cuesta trabajo conseguir trabajo y, más, un trabajo bien remunerado. Tenemos un sueldo mínimo recién incrementado a 930 soles y hay que lucharla bastante para completar la canasta básica familiar.

El Congreso de la República tampoco ayuda mucho porque iniciativas como las llamadas “Ley Pulpín” y “Ley del esclavo juvenil”, esta última de la fujimorista Rosa Bartra, solo han contribuido a enervar a los jóvenes y obligarlos a salir a las calles a gritar su protesta.

Dicho esto, al celebrarse mañana martes, 1 de mayo, el Día del Trabajo, es menester enviar un gran abrazo a todos nuestros lectores a nivel nacional e internacional en la esperanza de que vendrán mejores tiempos para el país. Con trabajo, mejora la calidad de vida.

Esto fue todo por hoy, guardo el lápiz chambeador, hasta mañana.

Esto fue todo por hoy, guardo el lápiz chambeador, hasta mañana.