“El fujimorismo no es , el fujimorismo lo hace el pueblo”, escribió  luego de conocer los 120 días de suspensión que le impuso su partido.

Esta oración del hijo engreído de Alberto Fujimori tiene varias aristas para evaluar. La primera y de mayor relevancia es que, para él, la bancada de su hermana  es solo un nombre que cobija a los congresistas porque el verdadero sentimiento naranja, el que deviene de su padre, preso en la Diroes, está en las calles. Ajá. Nos animamos a decir que la guerra entre hermanos alcanzó otro nivel.

Y más cuando Kenji incorpora una caricatura en la que él es Thor, superhéroe de Marvel, enfrentando a Hela, su hermana maligna en la película ‘Thor: Ragnarok’. Más claro, ni el agua. Aquí hay un enfrentamiento insalvable. ¿Quién ganará? Ya lo veremos, pero si el árbitro es don Alberto, el resultado es previsible.

Antes, Kenji ya había advertido que su bancada lo quiere disolver y le pide a Fuerza Popular que haga una oposición constructiva, tienda puentes y derribe muros, como lo demanda la inmensa mayoría del país. O sea que deje de fastidiar al presidente Kuczysnki, sobre todo en el Congreso de la República, y ayude en la lucha contra males como la corrupción. Corren las apuestas.

Esto fue todo por hoy, guardo el lápiz santo y sagrado, hasta mañana.

Esto fue todo por hoy, guardo el lápiz santo y sagrado, hasta mañana.