Qué tal.

Ni bien se conoció el audio en el que el juez  habla de una reunión con una “Señora K” de “La Fuerza N°1”, la mandamás de  puso el parche vía su cuenta de Twitter, negando ser la susodicha.

Congresistas keikistas como Becerril y Petrozzi al toque le hicieron la comparsa con el mismo argumento y todo iba de maravilla para la hija de Alberto Fujimori hasta esta mañana en que habló su subordinada Alejandra Aramayo.

“Creo que la alusión que hacen de la ‘señora K’ ciertamente es a la señora  y a Fuerza Popular”, dijo la congresista desatando un aluvión de críticas y traducciones.

Rolando Reátegui acusó que Aramayo cometió un desliz; Becerril cree que es probable que su colega se haya confundido al momento de expresarse; y Milagros Salazar sostiene que elucubrar o suponer que Keiko es la ‘señora K’ resulta irresponsable, entre otras versiones.

Esto es grave para una bancada o partido que se jacta de obediente, organizado y de un solo discurso. Keiko debe estar hecha un pichín y ya nos imaginamos el café cargado a la pobre Aramayo.

Esto nos recuerda cuando Yesenia Ponce acusó a Keiko de ser autora de la siguiente frase: “No me interesa así se perjudiquen diez mil, cien mil personas. ¡Chinecas no va!".

OJO CON ESTO:

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