Si bien los éxitos generan grandes satisfacciones, los fracasos dejan grandes lecciones. Esa es la actitud con la que debemos analizar el resultado del amistoso de la selección peruana de fútbol ante Alemania, la cual sin duda ha dejado lecciones que aprender. La primera, y la más importante, que hay mucho por trabajar. Los hinchas la teníamos clara, sabíamos que la bicolor no iba a imponer su juego ante los teutones. Pero la esperanza (y la ilusión) es lo último que se pierde. Juan Reynoso arriesgó y planteó su juego. Un primer tiempo en donde la bicolor estuvo sometida al juego alemán. Los dos tantos se dieron en esta primera etapa. El segundo tiempo, con la entrada de Gianluca Lapadula, que siempre lucha por cada balón, se pudo ver mejoras en Perú, pero no le bastó para anotar ni si quiera el gol de la dignidad. Gallese hizo lo suyo, por ello el partido no acabó en goleada. Sin duda el “Cabezón” tiene mucho por analizar con esta derrota y reacomodar bien sus fichas. Este martes nos espera Marruecos, una selección que dio la sorpresa en el último mundial. A ver cómo nos va.