Todavía recuerdo cuando, hace algunos años, escuché hablar a un investigador sobre el estudio poblacional en Perú que concluía que los ciudadanos consumían variedades de como parte de su dieta habitual y lo que se observó es que la fertilidad era mejor.

La raíz tuberosa se puede consumir hervida, licuada, dentro de jugos, leches, sopas, etc. Su sabor no es muy agradable, pero sus efectos son poderosos. Nutricionalmente, es fuente de energía por sus almidones, calcio, otros minerales y vitaminas.

Desde lo funcional, contiene alcaloides (no todos son adictivos o de impacto en el cerebro) que serían capaces de mejorar la libido, memoria y concentración, tiene un efecto vigorizante, equilibra las hormonas, tanto en hombres como mujeres, y mejora el rendimiento físico en los deportistas. Es un alimento que puede consumirse en todas las etapas de la vida.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: