Hamas: Mahmud Abás tiene que irse, porque es un espía de Israel
Hamas: Mahmud Abás tiene que irse, porque es un espía de Israel

Mahmud Al Zahar -hombre fuerte de Hamas en Gaza y máximo representante de su ala más dura- ve inaceptable una tregua de larga duración con Israel y denuncia en una entrevista a Efe el "colaboracionismo" del presidente palestino, Mahmud Abás, quien "tiene que irse" y al que califica de "espía de Israel".
Con su nieto a su lado y sentado en el jardín de su casa, en el barrio de Sabra de Gaza capital que, asegura, ha sido bombardeada por Israel cuatro veces, este cirujano de 61 años, exministro palestino de Exteriores, mantiene una postura inflexible contra Israel, vaticina nuevos enfrentamientos y se muestra displicente hacia la política palestina.
"Nosotros representamos a la resistencia, no nos importa si representamos o no a la mayoría", dice en referencia a las elecciones locales palestinas de octubre próximo, en las que Hamás podría perder apoyos.
"No buscamos controlar la Administración y no nos importa que gobierne Al Fatah, ya les hemos dado el gobierno de consenso, con todos sus ministerios, que es más importante que los ayuntamientos. No nos preocupan las elecciones, mientras que nadie toque la resistencia", recalca.
Al Zahar tiene durísimas palabra con el liderazgo palestino en Ramala y afirma que "no se puede ser un espía para los israelíes, como Abás, que dice que es sagrada la que llama cooperación de seguridad con Israel, cuando lo que está haciendo es espiar para la ocupación".
"Abás tiene que irse. Y no solo Abás, también la OLP (Organización para la Liberación de Palestina) tiene que disolverse. Ni representa a los refugiados que están fuera ni a la mayoría de los que están aquí. Han perdido todas las elecciones, las de 2005 y las de los sindicatos, estudiantes...", subraya.
Y agrega: "¿Qué diferencia hay entre Abás y Jonathan Pollard? (espía israelí encarcelado treinta años por Estados Unidos). Ambos espiaban para Israel".
Tanto Abás como la OLP "tenían un proyecto, que era establecer un Estado palestino, y ahora el 60 por ciento de Cisjordania está en manos de los colonos, así que han fracasado. Cuando un Gobierno fracasa, debe abandonar".
Hamás, sin embargo, "prometió resistencia y lo ha logrado", considera.
Respecto a una posible reconciliación política, asegura con dureza que "la gente que colabora con Israel no puede unirse a gente que se opone a Israel".
"Yo trabajo para la resistencia, no puedo unirme a los que colaboran con la ocupación", responde tajante.
Admite que "la resistencia no triunfará pronto", pero está seguro de que algún día "liberará la tierra".
"Israel tiene poder, pero no ha logrado hacerse con un solo metro cuadrado de Gaza, de donde tuvo que escapar en 2005", resalta.
Al Zahar se refiere a los israelíes en territorio israelí como "colonos" que "vienen todos de fuera y no tienen derecho a estar aquí" y, ante una pregunta que incluye la palabra "Tel Aviv", interrumpe y señala que "Tel Aviv no existe".
"Nunca hemos dicho que vaya a haber una tregua de largo plazo con Israel", sentencia.
Uno de sus cuatro hijos, Jaled, murió en 2003 en el bombardeo de su vivienda en el que él resultó herido leve, mientras que otro, Husam, miembro de las brigadas de Ezedin Al Qasam, falleció también por fuego israelí en 2008.
Al Zahar opina que "los países árabes están con Israel" y "Occidente tiene un apoyo ciego" a ese país, pero advierte de que "eso no será eterno".
"La mayoría de los árabes son anti-Israel, pero los gobiernos no. No representan la voluntad de su pueblo y llegará un día en el que caerán y llegará la democracia real", augura.
A su juicio, uno de los errores históricos de la OLP ha sido desviar su atención de la resistencia para medrar en países árabes, como en el Líbano, "una gran digresión de los objetivos que solo beneficia a Israel".
Sobre el yihadista Estado Islámico (EI), considera que Hamás lo ha derrotado en su territorio.
"Suprimimos a Dáesh (acrónimo árabe para el EI) aquí. Trataron de matar a mucha gente, de hecho lo consiguieron con una bomba en Rafah, pero nos enfrentamos a ellos y la mayoría ha escapado de Gaza. Algunos han muerto en Irak o Siria", explica.
"Nosotros no aceptamos a Dáesh. Los arrestamos, discutimos con ellos. No tienen formación, defienden que todo el mundo es infiel, incluido Hamás. Eso no es el islám", afirma.
Respecto a la entrega de los cuerpos de dos soldados israelíes y de dos civiles que entraron en la franja, indica que "no hay negociaciones" con Israel y que "no las habrá hasta que se libere a los que salieron con el pacto de 2011 y fueron arrestados de nuevo".
"No vamos a pagar el mismo precio dos veces. Nosotros no somos la OLP, que firma acuerdos y luego se echa para atrás", destaca.
El dirigente islamista también niega rotundamente que algunas ONG en Gaza desvíen dinero a su grupo y señala que esas acusaciones israelíes "forman parte de un plan para frenar el apoyo a la población civil y los refugiados".
Gaza. EFE