Reforma de libros escolares jordanos deja bien parado a Israel
Reforma de libros escolares jordanos deja bien parado a Israel

La reciente introducción de cambios en los libros de texto escolares en Jordania ha puesto en pie de guerra a los sectores más conservadores, religiosos y tribales, que los consideran un ataque contra la cultura árabe e islámica y un regalo para Israel.
Miles de personas se han manifestado en todo el país, en algunas ocasiones quemando los nuevos manuales educativos, acusando a las autoridades de haber suprimido, entre otras cosas, ejemplos ilustrativos extraídos del Corán o de haber cambiado la fotografía de una mujer velada por la de una mujer sin velo.
El nuevo currículum, por otra parte, ha sido alabado por escritores y activistas laicos y de izquierda, que consideran que favorece un pensamiento más ilustrado que ayuda a distanciar a las generaciones más jóvenes de la ideología terrorista y takfirí (que considera ateos a quienes no comparten sus ideas), así como a la creación de un Estado civil.
Uno de los principales oponentes a la reforma es el Sindicato de Profesores Jordano, que agrupa a más de 100.000 profesores.
Su portavoz, Ahmad al Hayaya aseguró que el nuevo currículum "omite deliberadamente aleyas coránicas y dichos del profeta (Mahoma) de tal manera que tiene como blanco los principios bien establecidos de la identidad árabe e islámica y de la cultura" en Jordania.
Al Hayaya insistió a Efe en que estos cambios no tienen precedente y consideró que se centran sobre todo en el árabe, en un intento de cortar la relación entre esta lengua y el Corán, el libro sagrado de los musulmanes, que según la tradición islámica fue revelado en este idioma "sagrado".
"En un solo libro (de texto), hemos registrado la omisión de 38 versículos coránicos, sin que la nueva versión incluya alternativa alguna", dijo Al Hayaya, tras recordar que las citas del Corán se han usado siempre como ejemplos de recursos lingüístico o literarios.
Además, señaló que numerosos símbolos islámicos han sido también suprimidos en las nuevas versiones "en un intento deliberado de romper los lazos entre las nuevas generaciones y sus antepasados".
En este sentido, se refirió a la supresión de una fotografía de una mujer con un velo, y su sustitución por otra de una mujer vestida al estilo occidental.
Al Hayaya criticó el hecho de que en los nuevos libros de texto se haya evitado hacer cualquier tipo de referencia a lo que denominó "masacres" cometidas contra los palestinos por el Estado de Israel en 1948.
Asimismo, rechazó la idea de que el viejo currículum ayudara a la expansión del terrorismo y el extremismo.
Las reformas han sido defendidas por el ministro de Educación, Mohamed Zuneibat, que ha enmarcado estos cambios en el "continuo proceso de modernización y desarrollo de los programas educativos" y ha negado que el objetivo sea atentar contra la cultura árabe e islámica.
"El nuevo currículum no incluye ningún texto que contradiga nuestra ley islámica o nuestra religión", aseguró recientemente.
Según el ministro, los nuevos manuales "impulsan los valores islámicos y humanos e instan al diálogo y a la apertura a otras civilizaciones, además de al respeto de la opinión de los otros".
Zuneibat también negó que los viejos manuales favorecieran la difusión del takfirismo o del terrorismo, como sostienen algunos escritores, activistas y responsables.
Entre ellos, el viceprimer ministro jordano, Yawad Anani, quien dijo recientemente al diario emiratí 'Al Bayan' que las modificaciones de los textos respondían a que se había "descubierto que algunos de ellos alentaban al terrorismo".
El decano de la Facultad de Ley Islámica de la Universidad de Jordania, Ahmad Jatib, justificó también la reforma asegurando que se trata de "un proceso muy natural que pretende modernizar y desarrollar el currículum para asegurar que cumple con los requisitos de la vida".
Jatib, miembro de la comisión que supervisó las reformas, dijo a Efe que las nuevas versiones de los libros "pretenden aumentar la conciencia de los estudiantes y mejorar su capacidad crítica, con el fin de que puedan refutar los argumentos de los takfiríes y de los terroristas, quienes buscan distorsionar el islam".
Según la prensa local, cientos de jordanos han muerto en Siria e Irak desde 2003, luchando primero contra la ocupación estadounidense y, posteriormente, en las filas de grupos islamistas armados o terroristas.
En los nuevos textos aparecen fotografías tanto de mezquitas como de iglesias y se describe al pueblo jordano como "mayoritariamente musulmán", en lugar de como "musulmán" a secas, para recoger el hecho de que en torno el cinco por ciento de los habitantes del reino hachemí son cristianos.