Avión espía de la OTAN sobrevolaba Rusia.
Avión espía de la OTAN sobrevolaba Rusia.

Un avión de línea con 142 pasajeros a bordo debió modificar abruptamente su trayectoria por encima del Mar Negro para evitar la colisión con un avión espía de la OTAN que casi provoca una tragedia aérea civil. “Se evitó una catástrofe”, denunció Rusia en momentos que desmiente las versiones de Estados Unidos y sus aliados respecto a una posible invasión a Ucrania.

“Se evitó una catástrofe [...], pero esto no significa que Estados Unidos y la OTAN puedan seguir poniendo vidas en riesgo con total impunidad”, declaró en un comunicado la portavoz de la diplomacia rusa, Maria Zajárova.

Según lo informado por la agencia rusa de aviación civil (Rosaviatsia), el incidente se produjo cuando el avión espía “descendió rápidamente”, atravesando la ruta establecida por un Airbus de la compañía Aeroflot que cubría la ruta entre Tel Aviv y Moscú con 142 personas a bordo.

En consecuencia, “la dirección y la altitud del vuelo comercial fueron modificadas inmediatamente”, explicó Rosaviatsia en el comunicado.

Según informó la agencia rusa, la tripulación del avión espía “nunca respondió” a los mensajes de los controladores aéreos.

En otro informe, la agencia rusa Interfax dio detalles más precisos sobre la brusca maniobra: el avión ruso descendió 500 metros para apartarse del avión de reconocimiento.


Jet privado

Según lo denunciado, el presunto avión espía también pudo colisionar con otra aeronave: un jet privado que volaba de Sochi a Skopie también tuvo que cambiar de trayectoria, según Rosaviatsia.

“La creciente actividad de los vuelos de aviones de la OTAN cerca de las fronteras de Rusia [...] provoca un riesgo de incidentes peligrosos con aparatos civiles”, denunció Rosaviatsia, que advirtió que prevé “protestar por la vía diplomática”.

Si bien no se precisó la nacionalidad del avión espía, Zajárova acusó públicamente en su comunicado a la fuerza aérea estadounidense de “representar un riesgo para la aviación civil”.

Por el momento, tanto la OTAN como Estados Unidos no han reaccionado a las acusaciones del gobierno ruso.

El incidente ocurrió en un contexto de tensión entre Rusia y los países occidentales, que acusan al gobierno ruso de concentrar tropas en las fronteras de Ucrania, con vistas a una invasión, algo que Moscú desmiente, informó la agencia de noticias francesa AFP.