Ante unas 60 mil personas congregadas en la plaza de San Pedro, el papa Francisco canonizó este domingo a la primera santa de Uruguay, la religiosa ítalo-uruguaya María Francisca de Jesús, cuyo verdadero nombre era Ana María Rubatto.

El pontífice argentino, vestido con sobrios paramentos sagrados en blanco y sentado debido a los dolores de rodilla que padece, pronunció la fórmula en latín con la que proclamó santa a Rubatto (1844-1904), quien dedicó parte de su vida a ayudar a los pobres de varios países de América del Sur.

Durante la ceremonia, la primera en tres años debido a la pandemia de coronavirus, fueron proclamados otros nueve santos,

Serán inscritos en el Libro de los Santos

Durante la misa en latín, con cantos y letanías, se pronunció el tradicional verso en latín en el que se pide que los 10 candidatos sean inscritos en el llamado Libro de los Santos para que se sean venerados por la Iglesia.

“Nuestros compañeros de viaje, hoy canonizados, vivieron la santidad de este modo: se desgastaron por el Evangelio abrazando con entusiasmo su vocación -de sacerdote, de consagrada, de laico-, descubrieron una alegría sin igual y se convirtieron en un reflejo luminoso del Señor en la historia. Intentémoslo también nosotros”, dijo el papa Francisco.