El perro más viejo del mundo tiene 25 años, lo que equivaldría a 175 años humanos. Es una hembra que se llama Penny y vive en la pequeña localidad de Neuenried, en el sur de Alemania. Su propietaria, Verena Wulf, asegura que Penny tiene por lo menos 25 años y con ello ostenta el verdadero récord de longevidad canina, que esta semana atribuían medios internacionales a la recientemente fallecida perra estadounidense Chanel, tras vivir 21 años.
La familia Wulf recogió a Penny de la calle en 1985, pero su veterinario, que realizó una revisión completa tras ser adoptada, dijo ya entonces que la perra debía tener algún año más.