En un concierto al sur de , una joven grabó cómo un hombre le echaba  a su trago. La mujer logró captar el momento cuando se graba a ella misma.

En el video se aprecia a la muchacha disfrutando del concierto con una amiga. Ambas miran a la cámara y hace muecas; hasta que de pronto parece un sujeto, quien sutilmente le pone droga en su vaso que ella misma sostenía.

La droga es Escopolamina o Burundanga, la cual anula la voluntad de las víctimas y es usado por violadores y ladrones de discoteca.

La joven que grabó este momento no quiso formar parte de las estadísticas de muchachas que terminan siendo violadas por el uso de una droga por parte de sus victimarios, por lo que presentó el material a las autoridades.

Se conoce que en cuestión de horas se logró la captura del sujeto, aunque no se ha revelado la identidad del mismo.

Este caso nos hace reflexionar sobre los peligros a los que se exponen las personas a diario, muchos sin saber dónde se encontrarán con personas de mala fe.

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