'El Gastrojeta' mira a la cámara al ser intervenido.
'El Gastrojeta' mira a la cámara al ser intervenido.

Un sujeto que comía en restaurantes y y que por el escaso monto era dejado libre por las autoridades, por fin fue llevado a prisión, pero no tanto por los se ocurrieron entre el 28 noviembre pasado y el 1 de febrero de este año, sino porque a raíz de ello recibió una multa que se ha negado a cancelar. Al fin, el día de su cumpleaños ha sido condenado a ir preso.

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A ese se le llama ‘El Gastrojeta’ y ha sido y es aún, porque saldrá libre en breve, el terror de restaurantes de la localidad española de Alicante, donde la ha pasado buen tiempo comiendo y sin pagar, lo que en tierra hispana se da por llamar ‘simpas’.

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El detenido es un ciudadano letón de 50 años que, tras degustar manjares como mariscos y entecots, era detenido al negarse a pagar y esperaba a que acudiera la Policía al restaurante porque sabía que debido a la menor cuantía no se le iba a llevar a prisión.


‘El Gastrojeta’ y su historia

Durante dos meses, desde el 28 noviembre pasado al 1 de febrero de este año, Aidas, el letón de 50 años, bautizado como ‘El Gastrojeta’, no ha parado de darse festines gastronómicos en diferentes restaurantes de Alicante y uno de la playa de San Juan, a costa de los hosteleros que quedaban pasmados cuando iban con la cuenta y no se les pagaba.

Comía de gratis, se plantaba sin pagar. Acá es detenido por la Policía.
Comía de gratis, se plantaba sin pagar. Acá es detenido por la Policía.

En total, 14 ‘simpas’ por los que fue detenido cada una de las ocasiones por la Policía Nacional. Además, en un centro comercial del centro de la ciudad, hurtó una prenda de abrigo valorada en 484 euros, por la que también fue arrestado.

En su currículum constan en este periodo 12 detenciones por presunto delito leve de estafa, una por estafa leve y delito de hurto, otra por delito leve de estafa y amenazas, y la última por delito leve de hurto.


Condena en su cumpleaños

Detenciones por las que ‘El Gastrojeta’ pasaba la noche en la comisaría y tras salir a la calle al día siguiente por tratarse de un delito leve, volvía a las andadas.

Una vorágine delictiva a la que se puso fin este jueves, precisamente el mismo día que cumplía años.

Un juzgado de Alicante le condenó en diciembre por una de estas comilonas a pagar 900 euros, multa a la que no ha hecho frente y por lo que ha sido enviado a la prisión alicantina de Fontcalent, aunque tan solo por 22 días.


Amenaza con cuchillo

El primer sinpa se produjo el 28 de noviembre en un restaurante situado en la zona de la explanada de Alicante, donde comió y bebió por 37,80 euros, sin pagar.

Días después, el 3 diciembre, en un restaurante de la avenida de Villajoyosa, no solo dejo de pagar 75,30 euros, también cogió un cuchillo de corte de la barra y amenazó al camarero.

Dos días más tarde, el 5 de diciembre, nada más salir del calabozo acudió a un local del Portal de Elche y consumió solo en bebidas 24 euros.


Comilonas gratis

En todos los casos, Aidas después de pegarse el festín confesaba al hostelero que no iba a pagar y esperaba tranquilamente a que se personara la Policía. Solo en las últimas ocasiones, el detenido simulaba encontrarse mal para tratar de evitar, sin éxito, la detención.

La comilona más cara, la disfrutó el 16 de diciembre en un restaurante del muelle de poniente del puerto por 81,50 euros. También, el día de Navidad, decidió celebrarlo con una lujosa comida de 63 euros.

Después de dos meses, el detenido había dejado de pagar 766 euros en comida y bebida. Casi siempre eligiendo los platos más caros, con especial predilección por el marisco y los entrecots, delicias que en las próximas semanas se va a ver obligado a sustituir por los sencillos menús carcelarios, aunque para Aidas seguirán siendo gratis.


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