El ladrón le pidió a su víctima dinero en efectivo, oro, un celular y pastillas de un ansiolítico. (Foto referencial: Twitter)
El ladrón le pidió a su víctima dinero en efectivo, oro, un celular y pastillas de un ansiolítico. (Foto referencial: Twitter)

Sucedió en la puerta de su casa. Una mujer de 55 años fue sorprendida por un ladrón cuando intentaba ingresar a su domicilio en Bahía Blanca, Argentina, y le robó 10 mil dólares, un celular y hasta pastillas de clonazepam.

Por si fuera poco, el facineroso, antes de escapar con las pertenencias de su víctima, le dio un fuerte abrazo y le dijo que “no dejara más abierta la puerta de su domicilio”, presumiblemente para que no sufra algún robo, cuenta .

Según fuentes policiales, el hecho se produjo esta semana, alrededor de las 07:00 p.m., cuando Patricia Morales ingresó a su casa, en la calle Castelli al 900 de Bahía Blanca. El delincuente la sorprendió y le exigió entregar sus pertenencias.

Sin armas de por medio, el ladrón le pidió todo lo que llevaba con ella, dinero en efectivo, oro, un celular y pastillas del ansiolítico, porque necesitaba “darle de comer a sus hijos”.

Antes de retirarse, el ladrón abrazó a la mujer y le recomendó que no dejara más la puerta de la casa sin llave, tras lo cual escapó a pie.

Morales presentó la denuncia en la comisaría segunda de Bahía Banca, donde los efectivos no tardaron en iniciar la búsqueda del ladrón y requisaron las cámaras de seguridad de la zona para tratar de identificarlo.

La mujer contó a la prensa local que el asalto ocurrió al ingresar a su domicilio, después de pasear a sus perros. Atrás suyo ingresó un hombre que le dijo que no se asustara, que solo era un robo.

“Me dijo que no era asesino, que era chorro para darle de comer a sus hijos”, expresó la mujer, al detallar que “se llevó diez mil pesos, el celular y se tomó tres Clonazepam”.

“Me dio un abrazo y me recomendó que no deje más la puerta sin llave”, agregó la víctima.

“Doy gracias a Dios que no estaba armado, fue un mal momento y estoy bien”, finalizó.