Imagen
Imagen

La es una emoción no exclusiva de los niños porque los también la sufren y muchas veces, el poco entendimiento de ella les genera grandes problemas. Poder manejar la ansiedad es una habilidad que seguramente les ayudará de mucho en su vida adulta y aunque es un asunto complicado, controlarla atrae otras virtudes como la paciencia.

El sitio PsychCentral publicó recientemente un trabajo de Renee Jaim, especialista en Psicología positiva de la Universidad de Pennsylvania, donde justamente se habla de la forma adecuada en que se debe hablar con un niño acerca de la ansiedad. Estos son los cincos puntos claves:

1. A través del dibujo. Hay que preguntarle al pequeño si puede dibujar lo que siente ya que esta actividad funciona como una salida para sus sentimientos cuando le resulta imposible expresarlo con palabras.

2. Controlar la situación a través del juego. Por ejemplo, plantearle al niño una escena en la que van a inflar un globo ficticio podrá ayudar a que controle su respiración. Convirtiéndolo en un juego el resultado puede ser diametralmente mejor. 

3. Hacer que crea en sí mismo. Supongamos que el niño muestra ansiedad ante una actividad en la que no se considera capaz es una buena idea hacer que se graben y repitan diez veces "yo puedo hacerlo".

4. Detener el tiempo. Crea una situación en la que al niño se le diga que ponga su preocupación en un lugar específico y luego, váyanse a caminar. Después "recogerán" la preocupación en un momento de mayor calma.

5. Emplear un objeto de apego. Además de dibujar, también es recomendable elaborar una lista de cosas que calman al niño, ya sea una situación u objeto.