Magaly Moro

Mercedes (58 años, Chorrillos). Doctora Moro, hay una situación con mi esposo que me preocupa pero, a la vez, me molesta demasiado. Resulta que Roberto brinca mucho al dormir y, últimamente, estos espasmos le ocurren tan seguido que hasta me asusta. Lo peor del asunto es que, al despertar, no recuerda nada y no lo veo cansado en el día, pero a mí sí me altera el sueño. Es un tormento.

Le he pedido que vaya al médico, pero se niega rotundamente. Créame que, al principio, se lo pedía de buena manera, pero estoy cansada de su negativa. La última vez tuvimos una fuerte pelea que no terminó bien. Desde entonces, mi pareja ha preferido dormir en el mueble de la sala.

Como si sus espasmos fueran poca cosa, Roberto también ronca como si fuera una motocicleta. Lo que me enoja es que todos estos males podrían ser tratados y así mejorar nuestras noches, pero, por su terquedad, cada vez nos estamos alejando más y más.

Doctora, sé que mi marido tiene un trauma con los médicos, luego que su padre falleciera por una negligencia médica, pero no puede vivir así toda la vida. Me enerva que sea un completo egoísta que solo piense en sus miedos y no mueva un solo dedo por nuestro bienestar.

He hablado con mis hijos sobre el tema, ellos también lo han intentado convencer, pero sin resultados. Recurro a usted porque nos está afectando como pareja. Yo no quisiera separarme de mi panzón. Ayúdeme, por favor.

Ojo al consejo

Querida Mercedes, tienes que hablar seriamente con tu marido y brindarle todas las facilidades para que acuda a un médico. Otra opción es que le propongas que reciba ayuda psicológica, es probable que la muerte de su padre lo haya dejado muy afectado y a eso se deban los espasmos.

Exprésale que no quieres que su relación llegue a su fin por algo como eso. Suerte.