Magaly Moro

Alberto (62 años, Chorrillos). Señora Moro, luego de leer su sección por años y ser testigo de su ecuanimidad, recurro a usted para contarle mi dilema. Realmente, no me gustaría que mis hijos pasen por la misma situación que atraviesan los hijos de Carmona; sin embargo, mi actual pareja se opone rotundamente a mi decisión de hacer mi testamento en vida.

Yo soy un próspero empresario, con varios bienes y soy padre de 4 hijos, 3 varones de mi primer compromiso y una niña que tuve con Beatriz, mi actual esposa. Tras el caso de Tula Rodríguez y su disputa contra los hijos de su expareja fallecida, Javier Carmona, he conocido una cara de Beatriz que me ha sorprendido para mal.

Al ver todo lo que están pasando esos muchachos, decidí preparar mi testamento, pero apenas le dije a Bea, se puso como loca. “¿Para qué vas a hacer un testamento? Ese tipo de trámites auguran tu muerte”, fueron sus palabras iniciales.

Días después, nuevamente me mencionó el tema, me dijo que iba a perder mucho tiempo, que ese procedimiento era engorroso. Al verme muy firme, señaló: “no se te ocurra dividir tu herencia en partes iguales, tus hijos ya son grandes, en cambio, Isa es pequeña y necesita más apoyo financiero”. Yo me quedé exhorto porque pensé que su preocupación iba por otro lado. Hasta la fecha, Bea insiste en que no haga el testamento. ¿Qué me aconseja, doctora? Me siento muy confundido, decepcionado, no sé qué hacer.

OJO al consejo

Querido Alberto, qué bueno que te preocupes por la vida de tus hijos cuando no sigas en este mundo. En primer lugar, dejar un testamento no es un proceso engorroso y, en segundo lugar, Beatriz no tiene porqué prohibirte realizar este trámite. Lo que te recomiendo es que hables seriamente con ella y prestes mucha atención a lo que expresa. Sé cauteloso y sigue firme en tu decisión.