Magaly Moro

Jean Carlos (26 años, Ate Vitarte). Doctora, estoy muy preocupado sobre el futuro de mi relación con Angélica. Apenas vamos dos meses juntos y mi familia ya le ha puesto la cruz; dicen que no es la mujer correcta para mí y que mejor termine con ella. Este odio absurdo hacia ella inició hace una semana, cuando Angélica vino a mi casa para conocer a mi madre y hermana por primera vez.

Como mi familia es del Cusco, aquel día mi mamá preparó comida típica para sorprenderla, ya que mi chica jamás había degustado platos como el picante de cuy, la sopa de quinua o el delicioso kapchi de habas. Sin embargo, cuando Angélica se sentó en la mesa, todos notamos su cara de incomodidad. “Disculpen, pero ¿en serio vamos a comer esto?”, preguntó muy seria, mientras veía con disgusto las partes del cuy sazonado. Mi hermana le explicó, calmadamente, que esos platos fueron preparados para ella y que todo estaba muy rico. Pese a ello, Angélica se negó a probar un solo bocado, excusándose de un inesperado “dolor de estómago”.

Todo el almuerzo la pasamos en silencio, doctora. Fue demasiado incómodo, mi hermana y mi madre no dejaban de verla con mala cara. Traté de apaciguar la tensión con algunos chistes, pero fue imposible y Angélica tampoco cooperaba, pues se dedicó a ignorarnos con el celular en la mano.

Ay doctora, ¿ahora qué hago? Me gusta mucho Angélica, pero no sé si deba hacerle caso a mi familia. Su actitud me decepcionó mucho.

Ojo al consejo

Jean Carlos, como bien me cuentas, tu enamorada fue muy desconsiderada al rechazar la comida que preparó tu madre con tanta ilusión. No obstante, una mala primera impresión la tiene cualquiera. Organiza una nueva reunión para que se conozcan mejor. Si la actitud de Angélica persiste, quizás debas seguir los sabios consejos de tu familia. Considéralo. ¡Suerte!