Siempre la  he amado
Siempre la he amado

Héctor (28, Ate Vitarte). Doctora, hace 15 años me presentaron a una niña muy linda y sonriente, Andrea. Años años después, cuando acabó el colegio, se volvió una hermosa mujer. Su sonrisa bella hizo que me enamorarse de ella perdidamente. Mediante las redes sociales hablábamos cuando no había tiempo para vernos. Un día me animé a decirle que me dejase de ver como un hermano y que se diera cuenta del hombre que soy. En ese entonces, Andrea tenía 16 años y yo 24.

Decidimos ser pareja, aunque a veces nos veíamos a escondidas de sus padres luego de que ella salía de la academia. No me molestaba esa situación porque sentía que se trataba de un amor sincero gracias a la ternura característica de su edad. Lamentablemente duramos 8 meses. Pese a que la quería mucho, debí volver a Ucayali por mi madre. Hace poco me encontré con ella y la verdad, como siempre, caí rendido a sus encantos. Traté de acercarme a Andrea nuevamente, pues en verdad la quiero, pero la noté esquiva e incluso me decía que, por favor, ya no le hable más pues ella me haría daño y que debía buscarme a una mujer de mi edad. No entendí esa situación hasta que hace una semana, vi en su Facebook un video de cómo su novio le había pedido la mano y ella aceptaba frente a toda su familia. Se me rompió el corazón, siempre creí que volveríamos a estar juntos, pero veo que me equivoqué. Estaba muy ilusionado con que algo pase entre ella y yo. Ayúdeme, doctora. ¿Cree que vale la pena luchar por Andrea o sacarla de mi vida para siempre?

CONSEJO:
Ella ha hecho su vida, hazla tú también. Recuerda que está a punto de dar un paso muy importante. Si la buscas podrías arruinar sus planes.

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