Un olor muy penetrante, una luz brillante, un ruido fuerte y persistente, e incluso el solo hecho de viajar en un auto y sentir un mareo pueden ser factores desencadenantes de migrañas, ese dolor insoportable y palpitante que afecta a cuatro mujeres por cada hombre.
La migraña común se caracteriza por un dolor pulsativo que se inicia en la frente o en la sien y puede abarcar el ojo y extenderse al otro lado de la cabeza. A veces llega precedida de trastornos en la visión como luces intermitentes o líneas brillantes, o acompañada de náuseas e intolerancia al ruido y la luz.
Las causas
Es muy común que el estrés emocional o físico tenga consecuencias en nuestra salud. En ocasiones las migrañas comienzan tan pronto como el estrés acaba, razón por la cual suelen presentarse los fines de semana o días feriados.
Los cambios hormonales durante la menstruación, los malos hábitos de sueño (dormir demasiado, muy poco o tomar siestas), saltarse comidas, hacer dietas e ingerir ciertos alimentos también pueden ser causas de migrañas. Asimismo, se ha comprobado cierta predisposición genética, pues familiares en primer grado de pacientes con migraña tienen mayor riesgo de padecerla.