Según reportes del Ministerio de Salud, 7 de cada 10 peruanos padece de estrés laboral.
Según reportes del Ministerio de Salud, 7 de cada 10 peruanos padece de estrés laboral.

Estrés es una palabra que todos conocemos y padecemos en mayor o menor grado en algún momento. Es esa sensación de tensión física y emocional que te atrapa cuando una situación o varias, llegan y no podemos controlarlas. Y el trabajo que desempeñamos, o el entorno en el que lo desarrollamos, también puede convertirse en una seria causa de estrés.

Según reportes del Ministerio de Salud (Minsa), actualmente, 7 de cada 10 empleados sufren de estrés laboral, el cual puede pasarnos la factura y desencadenar una larga fila de males.

Y es que esta situación se ha visto agravada a raíz de la pandemia, debido a que se implementó el trabajo desde casa, lo que en lugar de significar mayor tranquilidad, acabó desencadenando más carga de tensión y cansancio, ya que nuestro lugar de descanso se transformó en el área de trabajo y los temas familiares acaban mezclándose con los laborales.

Esta situación se ha visto agravada a raíz de la pandemia, debido a que se implementó el trabajo desde casa, desencadenando más carga de tensión y cansancio, ya que nuestro lugar de descanso se transformó en el área de trabajo y los temas familiares acaban mezclándose con los laborales.
Esta situación se ha visto agravada a raíz de la pandemia, debido a que se implementó el trabajo desde casa, desencadenando más carga de tensión y cansancio, ya que nuestro lugar de descanso se transformó en el área de trabajo y los temas familiares acaban mezclándose con los laborales.

“Casi todos padecemos estrés laboral en diversas ocasiones, incluso a pesar de que te guste tu trabajo” indica Suemi Kayo, asesora de bienestar y salud. “Uno puede sentirse estresado por los horarios, sus compañeros de trabajo, fechas de entrega o posibles despidos. Un poco de estrés es motivador y puede ayudarte a conseguir resultados, pero cuando el estrés laboral es constante, puede llevar a varios problemas de salud que pueden llevar inclusive a la depresión y ansiedad”, añade la experta.

Pero no hay que desesperarse; encontrar formas de aliviar el estrés puede ayudarte a mantenerte saludable y a sentirte mejor cada día. Por esa razón, Suemi Kayo nos brinda cinco consejos que podemos practicar para reducir el estrés laboral:

1. Fomentar la motivación personal. Mantenerse motivado es una de las mejores formas de luchar contra el estrés. Si se disfruta de realizar las tareas, de lograr los objetivos que se marcan y se establece una buena relación laboral, el estrés y la ansiedad se mantendrán alejados.

2. Dieta equilibrada. Somos lo que comemos y debemos tener en cuenta cuál es nuestra rutina alimentaria. La falta de tiempo y no comer a nuestras horas pueden desencadenar en malos hábitos alimenticios que van contra nuestra salud y tranquilidad.

3. Uso de aceites esenciales. También conocidos como esencias, promueven una serie de respuestas favorables en el organismo, por lo que constituyen la base de la aromaterapia. Una de sus propiedades es aliviar los estados de estrés luego de inhalarlos. Promueven un mejor descanso, alivian el dolor y mejoran nuestro humor, lo que en definitiva nos ayudará a combatir el estrés.

4. Realizar pausas activas. Relaja tus brazos a ambos lados de tu cuerpo y eleva tus hombros pretendiendo tocar tus orejas por 5 segundos. Descansa y repite el movimiento cada 2 horas, esto ayuda a reducir la fatiga, disminuir trastornos musculoesqueléticos y prevenir el estrés.

5. Relajación y un óptimo descanso. Descansar cuando estamos fuera de nuestro horario laboral, entender cuáles son nuestros momentos de libertad y dormir las horas necesarias harán posible que rindamos durante nuestra próxima jornada laboral.

Es importante resaltar que a pesar de que cada vez las empresas adquieren una mayor conciencia sobre la importancia de cuidar del bienestar del trabajador, pero todavía queda un largo camino por recorrer. Por ello, es tiempo de que uno mismo se dé cuenta de cómo lo está afectando el estrés para así empezar a controlarlo, lo que redundará en su beneficio y en quienes tiene alrededor.

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