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No es novedad que muchas mujeres deseen retrasar un poco su , con el fin de crecer profesionalmente. Esta tendencia ha ido tomando mayor fuerza con el paso de los años, lo cual también hace que pensemos cuáles serían las desventajas o riesgos de convertirse en  luego de los 30 años. Esto nos permitirá tener una mirada completa sobre lo que significa el cambio natural que algunas mujeres decidan optar.

El médico ginecólogo Enrique Noboa, sostiene que diversos estudios argumentan que entre los 31 y 35 años las ovulaciones empiezan a volverse menos frecuentes y efectivas, por lo que las edades ideas para que una mujer se embarace se encuentra entre el periodo comprendido entre los 25 y 30 años.

Sin embargo, destaca que decir ideales, no contempla que sean exclusivas o definitivas. "Hay mujeres que a los 45 años han tenido embarazos, incluso conocí a una paciente, de 47 años, que se embarazó y esto a veces resulta como una verdadera sorpresa de la vida", expresa.

Como dijimos en un inicio, se entiende que por las condiciones actuales, académicas o laborales, cada vez hay una tendencia a retrasar la , sin embargo, esto no significa que una mujer pasado los 40 años no pueda convertirse en madre.

De acuerdo al terapeuta Leah Seidle, las de 30 años tienen aún una buena cantidad de resistencia y adaptabilidad en su personalidad, al ser más flexibles y útiles para la crianza, que aquellas que tienen están en la segunda década de sus vidas.

Otros estudios sostienen en que los 35 son una edad clave para una mujer en el tema de la concepción, sin embargo, pasado este tiempo, la disminución en la fertilidad comienza a acelerarse. A partir de esta edad va aumentando progresivamente el riesgo de alteraciones en el número de los cromosomas del embrión. Esto, a su vez, hace que haya más posibilidades de sufrir abortos espontáneos y de tener bebés que padezcan síndrome de Down y con otras alteraciones cromosómicas.

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