¡Cuidado padres! 3 males que requieren cirugía pediátrica
¡Cuidado padres! 3 males que requieren cirugía pediátrica

Los  son propensos a enfrentarse a diversas anomalías que afectan su salud en el mediano o largo plazo. Existe una amplia gama de enfermedades pediátricas que tienen como indicación una intervención quirúrgica, muchas de estas por malformaciones congénitas y patologías crónicas. Es por ello que Diego Aspiazu, cirujano pediátrico de la Clínica Anglo Americana, comenta cuáles son los principales males que suelen requerir de cirugía en los niños.

1. Hernia Inguinal. Es una patología frecuente en  y ocurre desde su nacimiento, convirtiéndose en una enfermedad congénita sin causa conocida. Se trata de un pequeño bulto en la zona de la ingle o un agrandamiento del escroto, por la persistencia de un conducto inguinal que se debió cerrar durante la gestación, este puede tener contenido o no. 

Resultado de imagen para Hernia Inguinal

Es más frecuente en hombres y en prematuros, debido a que estuvieron menos tiempo en el útero y no alcanzaron a cerrar el conducto. Cuando es detectada en niños más grandes, suele ser porque no se diagnosticó en la época neonatal y puede deberse a que la hernia era muy pequeña o el menor no presentaba síntomas.

2. Fimosis. Es una condición muy habitual en niños que consiste en la imposibilidad de bajar la piel del prepucio del pene. Esta complicación suele desaparecer por sí sola antes que el niño cumpla los tres años de edad, sin embargo, en ocasiones la piel puede presentar una especie de anillo que impide igualmente descender la piel.

Resultado de imagen para Fimosis

3. Criptorquidia. Es el problema genital más recurrente en pediatría y se refiere a un testículo no descendido o mal descendido. Esto sucede durante el último trimestre del , donde los testículos deben descender hasta el escroto y luego, el conducto inguinal debe cerrarse para que éstos permanezcan en una bolsa fuera del abdomen. Sin embargo, esto a veces no sucede, produciéndose la criptorquidia unilateral (uno de los testículos no baja) o bilateral (ambos no descienden).

Resultado de imagen para Criptorquidia

Si un niño con criptorquidia bilateral llega a los 10 o 12 años de edad sin haberse sometido a una cirugía, hay posibilidades de que se comprometa la fertilidad, pues hay evidencias de que las células que producen los espermatozoides no se desarrollan adecuadamente cuando los testículos están fuera del escroto, además de un riesgo aumentado de torsión testicular. Entre más alto esté el o los testículos, y mientras más tarden en bajar, mayor es el riesgo que corre el niño de sufrir atrofia testicular y esterilidad.

TE PUEDE INTERESAR: