Sin lugar a dudas la estación en que más riesgos tiene la mujer de padecer de infecciones vaginales es el verano, pero eso no significa que el resto del año ella esté libre de tener este tipo de problemas. Debido a la condición húmeda de la vagina, ésta se convierte en un caldo de cultivo de virus y bacterias, por ello la limpieza es fundamental y requiere de mayor cuidado.
En primer lugar mantenga una adecuada higiene de la zona íntima, para ello use agua y un jabón suave; no aplique ningún lavado especial, eso podría alterar el PH natural de la vagina. Elija prendas de algodón, este material evita la sudoración y facilita la ventilación de la piel.
Las infecciones vaginales o vaginitis se producen por hongos, virus, bacterias o a consecuencia de una enfermedad de transmisión sexual; la mayoría son fáciles de tratar, pero si se descuida puede afectar otros órganos como los riñones. Por ello, aparte de seguir estas recomendaciones, no deje de visitar periódicamente a su ginecólogo, sobre todo si usted mantiene una vida sexual activa.