Para una modelo con una carrera ya consolidada y aún joven, no estar en el New York Fashion Week significa tener una razón de peso. Kendall Jenner parece tenerla y está disfrutando de ello.
Se sabe que luego del final de la temporada pasada, la modelo decidió poner pausa a su trabajo en las pasarelas para dedicar tiempo a ella misma pues sufre de ataques de ansiedad.
Incluso su madre, la empresaria y matriarca del Clan Kardashian-Jenner, Kris Jenner, viajaba con ella para darle apoyo durante los duros y ajetreados (y glamorosos) días que tenía que viajar entre Nueva York, París, Milán y Londres para darte apoyo y poder lidiar on el estrésc.
Pero en esta temporada, la modelo fue vista como invitada en el desfile de Longchamp en Nueva York (usando un vestido Balmain color morado), totalmente sonriente y fabulosa.
De acuerdo a información de portales como InStyle México, la modelo declaró para W (una conocida revista de modas internacional: "Me estoy tomando un tiempo para mi misma. Además, siempre es divertido estar del otro lado de la situación y estar del otro lado de la locura. De hecho, lo disfruto".
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