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De acuerdo a un reciente estudio,  podría ser una de las mejores alternativas para liberar dos tipos de hormonas muy beneficiosas para nuestro organismo.

Por muchos años se ha creído que las lágrimas eran el principal signo de debilidad de una persona o demostrar una personalidad inmadura. Sin embargo, varios secretos estarían ocultándose por años tras estas creencias.

Cuando una persona está triste, de manera automática el cuerpo libera sustancias que juegan un papel como calmante natural. Eso ayuda a que el dolor sea soportable en cuestión de segundos.

No obstante, con el llanto dos clases distintos de hormonas, llamadas opiáceos y oxitocina, que tienen la capacidad de aliviar el dolor. En este caso funcionan como anestesias naturales, que nos brindan tranquilidad y, en cierto modo, un poco de ‘relajación‘.

Entre otros beneficios que puede brindar este hábito, se encuentra su efectuvo poder para evitar la deshidratación de las membranas mucosas de los ojos, pues los lubrica y mantiene humectados.

Asimismo, las lágrimas también tiene la capacidad de matar ciertas bacterias en cuestión de minutos, debido a un poderoso fluido llamado lisozima.

Por otro lado, también contribuye a reducir el estrés, efecto similar que se producir cuando sudamos. La gran cantidad de magnesio que eliminamos a través de las lágrimas, ayuda a controlar las emociones y evitar la profunda fatiga, irritabilidad, depresión, ansiedad y otros desórdenes que pueden afectar gravemente la estabilidad emocional de cualquier persona.

Recuerda que ante cualquier consulta especializada no dude en acudir ante un especialista en el tema, quien podrá detallar de manera exhaustiva el resto de ventajas que tiene  y que no sabías. No tengas temor de mostrar tus dudas o tus emociones en el momento que veas conveniente. La idea es mostrar que si bien podremos tropezarnos, volveremos a salir a adelante.

¡Tienes que ver esto! 

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