¿Son peligrosos los lunares carmesí? ¡Conoce todo sobre ellos!
¿Son peligrosos los lunares carmesí? ¡Conoce todo sobre ellos!

Los lunares son lo más común que podemos presentar en nuestro cuerpo, estos por lo general son de un color marrón oscuro, sin embargo también pueden aparecer de color carmesí o rojo. 

Este tipo de , que pueden aparecer en cualquier momento, no duelen y suelen aparecer en las personas de piel blanca y de edades medianas. Por su peculiaridad, los lunares rojos dan un atractivo especial.

Tener un lunar no es motivo para alarmarse ya que pueden aparecer en cualquier momento y no representan un peligro inmediato para la salud. Sin embargo cuando veas la aparición de un nuevo lunar toma en cuenta lo siguiente: 

1. Tamaño: Los  son puntos pequeños, que llegan a medir entre 1 a 4 milímetros, pero si empiezas a notar que en el transcurrir de las semanas crece, este puede ser un indicio de algún problema hepático y es mejor acudir a un dermatólogo. 

2. Cantidad: Con la edad suelen aparecer uno que otro lunar, pero si notas que de repente tienes más lunares de lo que recuerdas, acude al dermatólogo lo más pronto posible para descartar algo mayor. 

3. Lugar: Un lunar rojo puede aparecer en cualquier zona del cuerpo como las piernas, el rostro, las manos, la espalda y en los genitales. 

4. Forma y contextura: Los lunares son circulares y lisos, pero si presenta una forma irregular y con una contextura rugosa será mejor acudir a un especialista. 

Las causas por lo que nos salen lunares son: 

1. Herencia genética: Muchos de los lunares que tenemos son hereditarios, es decir, nuestros padres o familiares también los tuvieron, algunas veces coinciden en el lugar donde salen. 

2. Exposición solar: Este puede ser el principal factor para la aparición de lunares rojos, es importante que durante el verano se use bloqueador solar, si se tiene una piel delicada, debe aplicarse cada vez que salga. A cuidarse más durante el verano.

3. Alimentación: También se atribuye a la aparición de lunares por una alimentación escasa en fibra, haciendo que el cuerpo de llene de toxinas que puedan afectar el sistema digestivo y el hígado. Algunas veces también aparecen por desórdenes hormonales.

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