A partir de los 6 meses de edad la leche materna sigue siendo necesaria, pero deja de ser suficiente y es momento de añadir alimentos sólidos que completen los nutrientes que necesita el bebé para su crecimiento y desarrollo.
En el primer año de vida el ser humano alcanza la mayor velocidad de crecimiento de toda su vida: crece, en promedio, 25 centímetros y triplica su peso.
Los primeros alimentos no pueden limitarse a un solo tipo, es decir, papillas de una sola verdura o tubérculo, sino que tienen que incluirse una variedad de vegetales en una sola papilla.
Para aplicarlo de una manera práctica, hay que considerar la papilla como un tiempo de comida e incorporar los alimentos de la olla familiar. Por ejemplo, si cocinó estofado de pollo, separar todos los ingredientes, sancochar, triturar y dar al bebé sin condimentos ni sal.
Algunos alimentos considerados alérgenos, como el huevo, pescado, entre otros, pueden postergarse solo si hay alergias en la familia.
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