Primeros auxilios para tu engreído
Primeros auxilios para tu engreído

Son seres indefensos y por tal están expuestos ante cualquier eventualidad. Posibilidad que aumenta cuando los bebés ya tienen movilidad y gatean o dan sus primeros pasos por la casa; situación en la que mantenerlos quietos se vuelve más difícil y se exponen a ser víctimas de accidentes pues no calculan riesgos.

¿Cómo actuar?
Los primeros auxilios son cuidados que se proporcionan tan pronto se sufre un accidente o presenta algún síntoma súbitamente. En caso de que los niños sean víctimas de un accidente, no hay que dejarse invadir por el miedo. Se debe tratar de controlar la angustia que puede generar el llanto del pequeño por un accidente y tener claro que se debe actuar con rapidez y correctamente.

Lo que debes hacer en caso de:

Cortes y heridas
Con las manos bien lavadas, limpiar la herida con agua y jabón. Desinfectar con un antiséptico. Después, taparla con una gasa estéril y sujetarla con un esparadrapo. Si la herida es muy superficial, es mejor dejarla al aire. Si es muy profunda, acudir a un centro médico para que la suturen.

Picadura de insecto
Si tiene clavado una aguijón sácalo presionándolo hacia afuera con la ayuda de tu uña. Si tratas de quitarlo con los dedos o una pinza, podrías vaciar más veneno en su cuerpo. Lava bien la zona con agua y jabón. Puedes ayudar a que le calme la picazón aplicándole una compresa fría.

Caída de un mueble
Como los huesos de los bebés son suaves, no se fracturan tan fácilmente. Más allá del dolor producido, obsérvalo cuidadosamente las horas siguientes a la caída, particularmente si se golpeó en la cabeza y presenta vómitos. Usa una compresa fría en caso de aparecer un chichón.

Cuerpo en el ojo
En caso de entrar polvo, una pestaña o un mosquito; lavar el ojo con agua o suero fisiológico inclinando la cabeza y dirigiendo el chorro al ángulo interno del ojo. Si se visualiza el objeto, intentar sacarlo con un pañuelo mojado. Si no se puede extraer, acudir al médico.

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