¿Qué es el desorden explosivo intermitente?

Bajo estrés severo, cualquiera de nosotros es capaz de perder la calma y enfurecerse incluso hasta llegar a insultar a alguien. Esto es normal, pues se trata de un comportamiento de defogue ante una situación emocionalmente extenuante. No obstante, algunas personas se salen de sus cabales con demasiada frecuencia -y por razones que no parecen justificarlo-. En cada ocasión la tensión aumenta hasta que simplemente estallan. Este puede ser un indicio del desorden explosivo intermitente (DEI).

De acuerdo con un estudio de la Universidad de Harvard, el mal “se caracteriza por respuestas desproporcionadas de ira, las cuales llevan a hacer daño a través de actos o palabras violentos”. En pocas palabras, el DEI consiste en no poder resistir los impulsos agresivos, lo cual conlleva a atacar a otros o romper cosas. Usualmente, estos accesos desmedidos de ira vienen acompañados de tensión e irratabilidad creciente, aumento de la energía, pensamientos agresivos, inmediata sensación de alivio tras el episodio (aunque también es posible experimentar arrepentimiento, vergüenza y depresión).

El Instituto de Salud Mental de EE. UU. sostiene que las personas con el DEI son usualmente hombres y que el trastorno comienza a manifestarse en la adolescencia. Luego, el desorden se puede asociar con otros como la depresión, ansiedad o abuso de sustancias. Quienes padecen el DEI pueden presentar extrema sensibilidad al alcohol y tener un historial de infracciones y accidentes de tráfico.