¿Reconoces a estos tipos de metiches?

En el abanico de personajes entrometidos e impertinentes, la variedad es la regla. No obstante, hay ciertas clases de metiches a las que todos conocemos. Probablemente te suenan los siguientes:

1. El familiar. Seguro lo conoces bien. Es muy posible que tengas una tía o una prima a la que le gusta entrometerse en los asuntos de tu núcleo familiar y opina de todo, menos de lo que ocurre en su propia casa. Es capaz de juzgar y condenar a sus hermanos, sobrinos y allegados y hasta decirles qué es lo que tienen que hacer. Obviamente, está al tanto de la vida de todos ellos.
2. La suegra. Aunque está dentro del rubro de 'familia', merece ser tratada separadamente. Cuídate de ella porque todo el tiempo está pendiente de lo que haces y a la caza del error. No siente mayor placer que criticarte y hacerte quedar mal. Es su venganza por haberle quitado a su bebé.
3. La mamá. Si pensabas que la suegra ere tu karma en la familia, te olvidabas de tu querida mami. Puede ser que simplemente busque estar al tanto de lo que te pasa para ayudarte, aunque no se da cuenta de que termina siendo sobreprotectora. Muchas mujeres son así (tal vez tú también). ¿Si te enteras de que no invitaron a tu hija o hijo a una fiesta, llamas a la otra madre para exigirle explicaciones y que remedie la situación? Esto es dañino porque se acostumbra al retoño a no valerse por sí mismo. En otros casos, una mamá metiche termina invadiendo un espacio personal. Quiere saber todo sobre las relaciones románticas, amicales o laborales de su hijo(a).
4. El vecino. Esta especie es infaltable en cada barrio. Es aquella persona que vive pegada a la ventana para ver todo lo que ocurre en la cuadra. En los últimos años, con el 'boom' de la construcción ha surgido una nueva clase: el metiche de edificio. Puedes verlo interrogando día y noche al portero para enterarse de los movimientos de todos los residentes.