Durante mucho tiempo se ha pensado que los niños son los únicos que pueden sufrir de déficit de atención; sin embargo, investigaciones actuales han demostrado que cuando este trastorno no es atendido en la infancia, continúa en la vida adulta.

Ante esta realidad, la psicóloga clínica Juliana Sequera detalla cómo reconocer este problema y brinda algunos consejos para tratarlo.

¿Cuáles son las señales?

Si tiene problemas para realizar varias actividades a la vez, presenta bajo rendimiento a nivel intelectual y profesional, le cuesta terminar sus tareas y padece de falta de concentración, es probable que sufra de este trastorno.

¿Cómo manejarlo?

Para corregirlo, en primer lugar, debe asegurarse que efectivamente sufra este mal. Es necesario acudir a un psicólogo clínico y un neurólogo para ver si necesita algún tipo de medicación. Asimismo, es importante desarrollar una mejor planificación y organización de actividades.

“Debe empezar a llevar agendas y establecer hábitos muy marcados. Es recomendable realizar una lista con tareas para luego hacer check y sentir que está logrando cosas”, sugiere Sequera.

Por otro lado, se aconseja que tengan una especie de mural para colocar notas sobre eventos importantes y así no pasarlos por alto.

Apoyo.

En caso haya notado que un ser querido sufre del déficit de atención, lo mejor que puede hacer para ayudarlo es animarlo y guiarlo para que ordene sus tareas. También evite las críticas y las burlas ante cualquier episodio en que presente falta de organización. “Tenga empatía y no pronuncie frases como ‘andas en la luna’”, concluye la experta.

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