La vitamina D cumple múltiples funciones. Entre las más destacadas están su participación en la absorción del calcio a nivel intestinal y mantener un equilibrio mineral de calcio y fósforo. Además, participa en la fijación de calcio en los huesos. Sin vitamina D el almacén de calcio se va perdiendo y se generan problemas óseos.

La deficiencia de vitamina D causa raquitismo en el niño la que se caracteriza por anormalidades estructurales de los huesos largos, asociadas a dolor, reblandecimiento muscular y tetania hipocalcemia. En el adulto se presenta osteomalacia, en donde la densidad ósea está reducida y las fracturas pueden ser frecuentes.

Durante la pandemia del coronavirus tomó mayor relevancia la función reguladora de la vitamina D en el sistema respiratorio debido a que regula la actividad de las citoquinas a ese nivel. De tener cantidades insuficientes de esta vitamina, las citoquinas reaccionan causando inflamación incrementando la probabilidad de neumonía.

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