A medida que avanzas los meses, la cifra de fallecidos se incrementa,y con ello, el temor de la población a ser contagiados. Sensación que está ocasionando que muchas personas alrededor del mundo busquen prevenir o calmar aquellos primeros síntomas (fiebre alta, tos seca y falta de aire) del con  medicinas sin previa inscripción médica.

Razones:

El neumólogo  de la clínica Respira vida, Herbert Cuenca, señala que las personas suelen automedicarse porque se niegan aceptar que ese malestar pueda ser por Covid -19 y quieren creer que es un simple gripe o resfrío. Otro motivo recurrente es la falta de atención en los centros médicos, ya que al llamar a la central del Minsa no reciben ayuda  e intentan calmar los malestares con antibióticos. Asimismo, la razón más común es la falta de dinero para ir a una clínica lo que hace que las personas recurran a la receta de un vecino o familiar

Peligros:

Entre los principales riesgos de la automedicación destacan la posibilidad de anular los efectos de otros medicamentos, generar resistencias, caer en un exceso de dosis y la aparición de reacciones colaterales, lo que puede incrementar el peligro de mortalidad.

Otros países:

En Estados Unidos y parte de Europa, para evitar el contagio de coronavirus ingieren hidroxicloroquina, un fármaco  que combate la malaria y el lupus; sin embargo, expertos médicos han señalado que este medicamento no cura ni previene el covid -19, lo único que ocasiona es agravar la situación del contagiado, llevándolo incluso a la muerte como ocurrió en Francia.  Mientras que en el Perú en estos últimos meses, la población se ha estado automedicando con Ivermectina y Dexametasona.

Alternativa:

En lugar de administrarse fármacos para prevenir el contagio, lo mejor es asegurar una correcta alimentación. La doctora Claudia Matos Miranda, gerente de Medicina Complementaria de EsSalud, explicó que una persona con defensas bajas es vulnerable a padecer alguna enfermedad viral o infecciosa como el coronavirus. Es por ello que recomendó a la ciudadanía aumentar en su dieta el consumo de alimentos que contengan vitaminas A, C y D  como las frutas (naranja, la mandarina, lima, camu camu y aguaymanto) y las verduras (la lechuga, la acelga, brócoli y zanahoria) , ya que estos productos actúan como antioxidantes, fortalecen el sistema inmunológico y ayudan a prevenir enfermedades respiratorias. En el caso de la población con sobrepeso disminuir el consumo de sal y grasas, mientras que los pacientes oncológicos no deben olvidar incluir en su dieta los lácteos y frutos secos que contienen omega 3 y 6.