¿Se puede amar y obsesionarse a la vez con alguien?

¿Cómo podemos saber si la obsesión y el amor van de la mano? Aunque te sorprendas, este panorama se pueden vivir en una relación de pareja. Por ejemplo, en el caso de Friedrich Nietzsche, filósofo y músico alemán, ha sabido controlar sus celos cuando se fijó en Paul Rée y Lou Andreas-Salomé. Según la biografía, Salomé fue el amor más imposible del poeta. Al parecer, la lista de amores fallidos, relaciones destructivas y romances fatídicos fue larga para el filósofo alemán.

"El hombre ama dos cosas: el peligro y el juego. Por eso ama a la mujer, el más peligroso de los juegos". Nietzsche era un hombre enamoradizo que además de respuestas sobre la vida, se la pasó buscando el amor. Sin embargo, la forma en la que el pensador se enamoraba e intentaba conquistar a las mujeres que le interesaban, no era la mejor.

"Amar a una mujer hasta la obsesión pudo haber sido parte de la inmadurez emocional del autor de 'Así habló Zaratustra', o bien, consecuencia de su misoginia. Sin importar la razón por la que Nietzsche no podía controlar sus sentimientos y pensamientos por una mujer, tanto su obra como su vida estuvo empapada de referencias machistas."

De este ejemplo podríamos sacar conclusiones perfectas, sobre todo para saber cómo se vive en una relación de pareja. Lo que realmente hacía que Nietzsche se obsesionara hasta los huesos con mujeres que sólo lo consideraban un intelectual admirable, era la inseguridad sobre su propia virilidad. Esto se traduce también con las actuales relaciones de algunas personas, quienes a veces sienten una gran fijación con otros seres, pero no sólo por amor, sino también con obsesión. Recuerda que no es bueno sentir un gran enganche por alguien, sobre todo a la hora de establecer lazos de pareja formal.

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